Las llamadas "Líneas de Nasca", cuyo origen data del período prehispánico, pero que fueron dadas a conocer en 1939, por Toribio Mejía Xesspe; representan debido a su número y características, al conjunto de megaglifos más importante que existe en nuestro planeta y uno de los enigmas más inquietantes para la arqueología universal.
Las Líneas de Nasca están ubicadas en las
Pampas de Jumana, región Libertadores Wari, en Perú, Suramérica. Nazca es un
poblado ubicado 500 km al sur de Lima a unos 600 m de altitud; el nombre
"Nasca" proviene de la antigua y enigmática cultura preincaica. Estos
grandes geoglifos no sólo se hallan en la zona de mayor concentración, como en
la Pampa de Jumana, sino que están distribuidos en un ambiente geográfico más
amplio que incluye las cuencas de Santa Cruz, Rio Grande, Palpa, Ingenio y
Nasca.
Nasca es uno de los pueblos más
representativos de la gran diversidad de culturas que han existido en los Andes
centrales. Tras un largo desarrollo cultural que se remonta a la cultura
Paracas, el pueblo Nasca logró establecer una economía exitosa en una zona
sumamente difícil por su aridez y su geografía accidentada. Además de este
logro, tuvieron un gran aparato mágico-religioso, propio de las culturas
andinas. Junto con los Moche de la costa norte del Perú, destacaron
artísticamente por su artesanía, representada en su fina y policroma cerámica
así como en sus textiles. La mayor parte de los geoglifos se hizo mediante la
técnica de barrido superficial de cantos, formando líneas y campos dejinidos.
Los geoglifos comenzaron a alcanzar el interés nacional a partir del XXVII Congreso de Americanistas del año 1.939, realizado en Perú. Durante ese evento, Toribio Mejia Xesspe planteó algunas teorías acerca de su origen y utlización, donde la vocación mágico-religiosa debió desempeñar un papel importante en su concepción y ejecución. Entre los investigardores extranjeros que se ocuparon de su origen y función destacó Paul Kosok, quien desde el año 1.941 se interesó por este enigmático resto arqueológico y logró inquietar a la ciudadana alemana María Reiche, quien viene realizando desde esa fecha una importante labor, tanto de conservación como de investigación, mediante complejos cálculos matemáticos para deducir cómo fueron concebidas y ejecutadas estas figuras.
María Reiche afirma que los dibujos geométricos están compuestos de seis elementos básicos: cuadrángulos, triángulos, dos tipos de líneas zigzagueantes, líneas oscilantes y centros estrellados. Además se encuentran también frecuentes figuras en espiral. En los caminos definidos se aprecian grandes figuras trapezoidales y rectangulares que forman, junto con las líneas, conjuntos de proporciones realmente monumentales; los que en su mayoría están ubicados cerca de grandes poblaciones de la época, como la Quebrada del Fraile, Río Grande, Cahuachi y de algunas menores como Palpa e Ingenio.
Las más destacadas:
El Mono: Famosa figura que de aproximadamente 135 m y muestra al animal con solo nueve dedos y una cola en forma de espiral. Esta es una de las figuras más relevantes y se cree representa a la Osa Mayor.
Los geoglifos comenzaron a alcanzar el interés nacional a partir del XXVII Congreso de Americanistas del año 1.939, realizado en Perú. Durante ese evento, Toribio Mejia Xesspe planteó algunas teorías acerca de su origen y utlización, donde la vocación mágico-religiosa debió desempeñar un papel importante en su concepción y ejecución. Entre los investigardores extranjeros que se ocuparon de su origen y función destacó Paul Kosok, quien desde el año 1.941 se interesó por este enigmático resto arqueológico y logró inquietar a la ciudadana alemana María Reiche, quien viene realizando desde esa fecha una importante labor, tanto de conservación como de investigación, mediante complejos cálculos matemáticos para deducir cómo fueron concebidas y ejecutadas estas figuras.
María Reiche afirma que los dibujos geométricos están compuestos de seis elementos básicos: cuadrángulos, triángulos, dos tipos de líneas zigzagueantes, líneas oscilantes y centros estrellados. Además se encuentran también frecuentes figuras en espiral. En los caminos definidos se aprecian grandes figuras trapezoidales y rectangulares que forman, junto con las líneas, conjuntos de proporciones realmente monumentales; los que en su mayoría están ubicados cerca de grandes poblaciones de la época, como la Quebrada del Fraile, Río Grande, Cahuachi y de algunas menores como Palpa e Ingenio.
Las más destacadas:
El Mono: Famosa figura que de aproximadamente 135 m y muestra al animal con solo nueve dedos y una cola en forma de espiral. Esta es una de las figuras más relevantes y se cree representa a la Osa Mayor.
La
Araña: Con 46 m de largo,
que se ubica entre una red de líneas rectas y es parte del borde de un enorme
trapezoide.
El
Colibrí: Es otro de los
geoglifos más famosos por su armoniosa proporción. La distancia entre los
extremos de sus dos alas es de 66 metros
El
Pájaro Gigante: Esta figura,
elaborada al lado de un trapezoide, muestra un gran pájaro con cuello de
culebra cuyo pico señala al sol naciente. Esta gigantesca ave tiene una
longitud total de 300 m y 54 metros de ancho. Es considerado por los
científicos estudiosos de las pampas como el "Anunciador del Inti
Raymi" (fiesta incaica de adoración al sol), pues en las mañanas del 20 al
23 de junio al situarse en la cabeza y seguir con la vista la dirección de su
enorme pico, podríamos observar la salida del sol, exactamente en el punto
señalado por esta dirección.
No hay comentarios:
Publicar un comentario